Hagel ha señalado que ha ordenado a los servicios armados y a las agencias de su Departamento que decidan cuándo se reincorporarán los trabajadores, lo que podría producirse este mismo fin de semana. "Espero que reduzcamos significativamente, pero no eliminemos, la licencia de civiles afectados por este proceso", ha indicado Hagel, según recoge el diario 'The Washington Post'.
"Seguiremos intentando que todos los empleados civiles vuelvan a trabajar lo antes posible. Al final la mejor forma de poner fin a estos permisos forzosos tan dañinos e irresponsables y que podamos cumplir nuestras funciones como departamento es que el Congreso apruebe el presupuesto y restaure la financiación para el gobierno federal en su conjunto", ha añadido.
La medida se sustenta en una interpretación flexible de la ley aprobada por el Congreso la semana pasada y firmada ya por el presidente, Barack Obama, que prescribe que no se retendrá el pago de salarios a los militares. En el texto de la ley se incluyen frases generales que eximen a los civiles del Departamento de Defensa de este parón si prestan un apoyo directo a las Fuerzas Armadas.
Tras consultar con los abogados del Departamento de Defensa y con la Presidencia, Hagel ha decidido que está justificada la reincorporación de la mayoría de los trabajadores afectados por el parón basándose en esta última ley.
El propio Hagel ha explicado que el Departamento de Justicia les ha advertido de que la ley no permite el retorno masivo de la totalidad de los trabajadores civiles de Defensa, pero reconocieron que permite acabar con el parón forzoso "para los empleados con responsabilidades relacionadas con la moral, el bienestar, la capacidad y la preparación de los miembros de servicio".