En un comunicado, el viceportavoz de la secretaría general de la ONU, Farhan Haq, ha condenado este ataque y ha recordado que esta semana la capital iraquí ha sido escenario de "una serie de crímenes atroces como este".
"Expresamos nuestras más sinceras condolencias a los familiares de las víctimas, así como al Gobierno y al pueblo de Irak", ha señalado Haq.
Asimismo, ha trasladado la solidaridad del organismo al pueblo iraquí para que "resista a los intentos de que se expanda el miedo, la intimidación y el odio".
"Naciones Unidas continuará apoyando al Gobierno y al pueblo iraquí en sus esfuerzos de lucha contra el terrorismo y el extremismo violento, principalmente construyendo la confianza y la comprensión mutua a través de un diálogo pacífico e inclusivo", ha concluido.
El atentado con coche bomba ha sido perpetrado en una calle llena de garajes y frecuentada por vendedores de coches en la zona de Hayy al Shurta.
Estado Islámico ha reforzado los ataques en Irak en represalia por la campaña militar apoyada por Estados Unidos y destinada a acabar con su presencia en territorio iraquí.
Este ha sido el atentado más grave registrado en lo que va de 2017 en Bagdad y llega un día después de otro ataque en una zona también frecuentada por vendedores de coches.
El ataque del miércoles fue perpetrado por un terrorista suicida que hizo estallar una camioneta cargada de explosivos en el suburbio de Ciudad Sader, acabando con la vida de 15 personas y dejando a otras 50 heridas.