"Los vientos tormentosos han provocado que más de 50 personas hayan necesitado asistencia sanitaria, incluidos menores", ha informado el departamento de Sanidad del Ayuntamiento moscovita, que ha confirmado los once fallecidos. La tormenta ha durado unas dos horas.
Los decesos han sido causados por árboles caídos como consecuencia de las fuertes rachas de viento, que han derribado otros objetos que también han impactado sobre transeúntes según la Policía federal rusa.
"La tormenta ha tumbado varios centenares de árboles. Hemos pedido todos los medios necesarios para paliar las consecuencias de este desastre", ha apuntado el alcalde moscovita, Sergei Sobianin, a través de su cuenta en Twitter.
Una fuente de los servicios de emergencia ha informado a Sputnik de que el viento derrumbó más de 1.000 árboles en Moscú y en el Distrito Federal Central de Rusia.
Además, la tormenta dañó los techos de más de 30 viviendas en ese distrito federal; 20 localidades con una población total de más de 4.000 personas se quedaron sin electricidad. Según el centro meteorológico Fobos, la tormenta en Moscú se está debilitando, desplazándose hacia el este y el sureste de la provincia.