La OIM suspende sus actividades en Wau Shilluk a causa de los combates en la zona

EUROPA PRESS 02/02/2017 06:13

"Debido a este incremento de la inseguridad, la OIM ha tenido que posponer de forma indefinida el proceso de registro de cerca de 3.000 personas vulnerables", ha indicado en su comunicado.

Así, el jefe de la misión del organismo en Sudán del Sur, William Barriga, ha resaltado que "la violencia en (el estado de) Alto Nilo ha afectado una vez más la capacidad de la OIM y otras agencias de ayuda para dar ayuda a poblaciones muy necesitadas".

"Los civiles sufrirán sin duda alguna, ya que los combates esporádicos hacen más difícil que los trabajadores humanitarios entreguen sus servicios", ha agregado.

Los enfrentamientos entre las tropas gubernamentales y los rebeldes estallaron cerca de Wau Shilluk el 25 de enero, extendiéndose hacia la ciudad y la cercana Malakal, uno de los principales núcleos urbanos del país.

La OIM ha afirmado que el equipo del organismo, integrado por catorce personas, tuvo que evacuar las instalaciones el 27 de enero debido a la proximidad de los combates.

Naciones Unidas, la Unión Africana y la Autoridad Intergubernamental sobre el Desarrollo de África Oriental (IGAD) el domingo un llamamiento conjunto al fin de los combates en Sudán del Sur, expresando su "profunda preocupación" por el incremento de las hostilidades.

En su comunicado, alertaron del riesgo de "un incremento de la escalada de violencia intercomunal hasta convertirse en atrocidades en masa", así como de "la mala situación humanitaria" en Sudán del Sur.

Por ello, instaron a las partes a promover un diálogo inclusivo y a respetar el acuerdo de paz firmado en 2015, al tiempo que reiteraron su voluntad de trabajar por la paz, la seguridad y la estabilidad en el país.

La rivalidad entre el presidente, Salva Kiir, de etnia dinka, y el exvicepresidente y líder rebelde Riek Machar, que es nuer, se tradujo en un primer conflicto en diciembre de 2013, cuando el presidente del país decidió cesar a Machar como su 'número dos'.

El conflicto entre los dos bandos terminó con un acuerdo de paz firmado en agosto de 2015 y que implicaba el regreso de Machar a para que volviera a ser nombrado vicepresidente del país, nombramiento que llegó en abril de 2016.

Sin embargo, las continuas violaciones del pacto y los graves combates de julio llevaron al cese de Machar, que fue relevado en el cargo por el general Taban Deng Gai.

En diciembre, la ONU alertó de que el país está al borde de una guerra étnica generalizada a menos que la comunidad internacional intervenga y convenza a las partes enfrentadas de entablar un diálogo que lleve de forma definitiva a la paz.