Diecisiete personas mueren por ataques en el este de Ucrania

Noticias Cuatro/Agencias 30/01/2015 19:40

Dos delegados de los separatistas prorrusos han volado hasta la capital de Bielorrusia solo para anunciar que las conversaciones no se celebrarían este viernes y que regresaban a Moscú. Cualquier contacto sería el primero desde que el alto el fuego suscrito el pasado septiembre se viniera abajo la semana pasada ante el avance de los rebeldes.

Donetsk ha sido escenario de intensos disparos de artillería, incluidas salvas de lanzacohetes múltiples y fuertes ráfagas de artillería procedentes del la zona del aeropuerto, un constante campo de batalla.

Un cámara de Reuters en Donetsk ha dicho que ha visto cuatro cuerpos cerca de un centro cultural alcanzado por la artillería y una quinta persona muerta en un coche seriamente dañado. En el centro se estaba repartiendo ayuda humanitaria cuando ha impactado el proyectil. A un kilómetro de distancia, una sexta persona muerta yacía en el suelo donde un trolebús ha sido alcanzado.

Según la agencia rusa Itar-Tass, que cita a su vez a una agencia de noticias de Donetsk, en total han muerto doce civiles: dos en el trolebús, cinco en el centro cultural y otros cinco en otro distrito de la ciudad. Un responsable de defensa de los separatistas ha denunciado que los disparos procedían de Opytnoye "una zona neutral" al norte del aeropuerto, hasta donde "el Ejército va, abre fuego contra la ciudad y luego regresa a sus posiciones".

Kiev acusa a los separatistas

Por su parte, Kiev ha denunciado que el ataque de artillería en Donetsk ha sido obra de los propios rebeldes prorrusos para dar al traste la posibilidad de conversaciones de paz. Ambas partes han hecho denuncias similares durante el conflicto, que son imposibles de verificar.

En un comunicado, el Ejército ha acusado a los separatistas de haber usado "un cínico acto terrorista" para intentar perturbar la reunión prevista en Minsk del 'grupo de contacto' que integran Ucrania, Rusia y la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OSCE), así como los líderes rebeldes.

Por otra parte, el responsable de la policía regional de Ucrania ha indicado en Facebook que otros siete civiles han muerto y diez más han resultado heridos como resultado de los enfrentamientos en las localidades de Debaltseve y Vuhlehirsk, controladas por el Gobierno y foco del avance de los separatistas. El agua y la luz han quedado cortadas en las localidades, donde los cuarteles del Ejército están rodeados por los separatistas.

El Ejército ucraniano ha informado de que cinco de sus soldados han muerto y 23 más han resultado heridos en los enfrentamientos de las últimas 24 horas, al tiempo que ha definido como "dura" la situación en la zona de conflicto.

"Están usando repetidamente misiles Grad, artillería, morteros, tanques y lanzacohetes", ha denunciado el portavoz del Ejército, Andri Lisenko. "Los combates más feroces continúan en torno a la localidad de Vuhlehirsk. Tras los ataques masivos de artillería, los terroristas han atacado repetidamente los puestos de control del Ejército ucraniano", ha añadido.

Conversaciones en Minsk

La llegada de los negociadores separatistas a Minsk, donde se cerró el acuerdo de alto el fuego en septiembre pasado, ha sido el primer signo de reapertura de las negociaciones después de que los rebeldes lanzaran la semana pasad una nueva ofensiva.

Pero ni Kiev ni Moscú han confirmado que estén dispuestos a dialogar y uno de los líderes separatistas, Denis Pushilin, ha anunciado rápidamente que regresaban a Moscú. Según ha dicho, los rebeldes están dispuestos a seguir con su ofensiva y tomar más territorio si siguen los disparos de artillería contra Donetsk y otras ciudades bajo su control.

"Si los bombardeos se reanudan, entonces nos reservamos el derecho de continuar la ofensiva e ir hasta las fronteras de Donetsk y Lugansk", ha añadido, en referencia a las dos provincias en las que los separatistas han proclamado "repúblicas populares".