Condenados a 14 años por agitar hasta la muerte a su bebé de tres meses

Noticias Cuatro 02/06/2018 14:17

Los padres, identificados como Alistair Walker (28 años) y Hannah Henry (22 años) son los principales sospechosos de la muerte de su hijo. El bebé fue hospitalizado por lesiones que indicaban temblores, fracturas en las costillas o una hemorragia retiniana. La investigación ha sugerido que los padres lo zarandearon hasta que le sangrasen los ojos. Posteriormente, le sumergieron en agua helada con la intención de cortar la hemorragia que le habían provocado.

Lamentablemente, la salud del bebé Ah'Kiell no mejoró y las pruebas médicas revelaron que murió por una lesión cerebral. "No han mostrado ningún remordimiento real por lo que han hecho y no han dado ninguna explicación sobre lo que realmente sucedió, por lo que solo ellos saben la verdad", declara el inspector jefe, Richard Pefler.

Un examen post mortem confirmó las fracturas costales del pequeño y un patólogo dijo que estaban cicatrizando y que habrían sucedido semanas antes de morir. Por tanto, desmontan la defensa del padre, que echaba la culpa a los paramédicos que le trataron.

Un homicidio premeditado

El encargado del caso descubrió que Walker había buscado "síndrome del bebé sacudido", "puedo apretar a mi bebé", "hemorragia interna debido a un trauma" y "costillas rotas del bebé" en su móvil los meses antes a que ocurriera el caso, tal y como recoge The Sun.

La policía de Gloucestershire acusa al padre de "homicidio sin premeditación" y en la sentencia constatan la crueldad hacia el menor. La madre fue absuelta de esta causa, pero fue declarada culpable de permitir la muerte del niño. Fueron encarcelados 10 años y cuatro años, respectivamente. En ambos casos, el juez insistía en su carácter controlador y violento.