Después de dos meses de conversaciones y una intensa noche de negociaciones, Merkel ha logrado un gran pacto que le permitirá seguir gobernando los próximos cuatro años, formando coalición con el Partido Socialdemócrata.
La fijación de un nuevo salario mínimo, exigencia de la izquierda, es uno de los principales puntos de conflicto, sobre el que se ha llegado a un acuerdo. Se formará así una gran coalición a la que sólo le falta un paso: ser aprobada por el partido de Merkel.
Angela Merkel logró la victoria en las elecciones con un 41’5% de los votos, resultado que le dejó a solo 3 escaños de la mayoría absoluta. Por su parte, el Partido Social Demócrata (SPD) logró el 25,7%, lo que se traducía en 182 diputados.
El hasta ahora socio minoritario de Gobierno, el Partido Liberal Demócrata (FDP), solo se adjudicó el 4,8% de las papeletas, lo que le dejó fuera de la sede legislativa por no alcanzar el umbral del 5% y obligó a Merkel a buscar nuevas alianzas.