El estado sur de los Estados Unidos, Florida, ejecutará en la noche del jueves 24 de agosto a un supremacista blanco por haber asesinado a Robert Lee Booker –por motivos racistas- y a Robert McDowell. Mark Asay, de 53 años, fue condenado en 1987 por los dos asesinatos y ha estado esperando 30 para ser ejecutado.
El cuerpo del estadounidense estaba cubierto de tatuajes racistas, aunque ahora asegura haberlos cubierto con otros tatuajes. Mark Asay se justifica del asesinato racial asegurando que “he tenido amigos afroamericanos toda mi vida, pero he tenido que vivir en entornos muy hostiles y lo he tenido que manejar de la mejor manera posible”.
McDowell fue asesinado por Asay después de que ambos mantuvieran relaciones sexuales. Según el supremacista, el asesinato se produjo después de que el condenado se sintiera estafado por su víctima tras un trapicheo de drogas. Tres décadas después, se lamenta afirmando que "se me fue la situación de las manos".
Como informa Daily Mail, el preso asegura que debe ser puesto en libertad o ser ejecutado inmediatamente. Esta apelación fue rechazada por la Corte Suprema de Florida en el pasado mes de julio y Mark Asay será ejecutado con una nueva técnica.
Para la ejecución del condenado por homicidio se utilizará etomidato, un anestésico novedoso jamás utilizado en este tipo de condenas.
Primera ejecución en Estados Unidos después un año y medio
Con la imposición de la pena de muerte para Mark Asay, Estados Unidos realizará la primera ejecución a un preso 18 meses después de la última. En enero de 2016, la Corte Suprema de Estados Unidos declaró inconstitucional la ley que permite las ejecuciones en Florida.