El agresor se lanzó contra los dos policías al grito de "Allahu Akbar" (Dios es el más grande), según ha informado la Policía, antes de resultar abatido por los disparos de un tercer agente.
Uno de los agentes ha sufrido "heridas profundas a la altura del rostro", según fuentes policiales al diario 'Le Soir'.
La Policía ha establecido, de momento, un gran perímetro de seguridad alrededor de la avenida Pierre Mainz, escenario del ataque y el acceso a la comisaría se encuentra ahora mismo restringido al público.
El ministro belga del Interior, Jan Jambon, ha comunicado a través de Twitter su condena contra este "acto innoble" y ha transmitido sus pleno apoyo a los heridos y a sus familias afectadas por este incidente.