Junto a David Beckham, Kate Middleton participó en la tradicional gala que cada año emite la cadena BBC en la que se entregan los premios a las personalidades del año en el mundo de deporte.
Enfundada en un vestido verde de Alexander McQueen y su permanente sonrisa, la duquesa entregó el premio por toda su carrera a Sebastian Coe, presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Londres, y al ciclista Bradley Wiggins, ganador del último Tour, quien fue galardonado como personalidad deportiva del año.
Después de estar ingresada durante varios días en el hospital por sus vómitos severos y a pesar de haber sido obligada a cancelar todos sus compromisos oficiales, la duquesa no ha querido perderse esta gala como embajadora del equipo olímpico de Reino Unido.