La amenaza procede de la Fundación Nashir, que ha asegurado que Estado Islámico "remplazará los fuegos artificiales por cinturones explosivos y sustituirá los cánticos y los aplausos por llantos y lamentaciones".
"Sus celebraciones, reuniones, clubes, mercados, teatros, cines, centros comerciales e incluso hospitales son objetivos perfectos", ha dicho la Fundación Nashir en redes sociales.
A principio de mes, el portavoz de este grupo, Abu al Hasán al Muhajer, ya hizo un llamamiento a los seguidores del Estado Islámico a atentar contra los consulados y embajadas de Turquía.
El 19 de diciembre, Anis Amir, un tunecino que había jurado lealtad al Estado Islámico, secuestró un camión, mató al conductor y estrelló el vehículo contra un mercado navideño de Berlín, dejando 12 muertos y 56 heridos.