Majid Aghababaei, alto cargo del Ministerio del Interior, ha indicado que la interrupción de las exportaciones tuvo lugar en la noche del jueves, detallando que la explosión tuvo lugar a doce kilómetros de la frontera común.
El Gobierno turco no se ha pronunciado por el momento sobre estas informaciones. Se desconoce si la explosión ha sido accidental o si se habría tratado de un atentado contra el gasoducto.
El Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) --considerado como un grupo terrorista por Turquía-- ha llevado a cabo en el pasado actos de sabotaje contra las instalaciones petroleras y gasísticas en el sureste del país.