El Comité Consultivo Nacional de Ética (CCNE) avaló el martes unos cambios que el actual presidente galo, Emmanuel Macron, ya prometió durante la reciente campaña electoral. El portavoz gubernamental, Christophe Castaner, ha confirmado que es momento de "traducir" en una ley la recomendación del CCNE.
Castaner ha explicado al término del Consejo de Ministros que no se ha fijado todavía ningún calendario para introducir las revisiones del CCNE, pero ha recordado que éstas "van en el sentido de las posiciones" expresadas por Macron. El Gobierno espera lograr "el consenso más amplio posible", según medios locales.
Asimismo, el Ejecutivo ha apelado a la "serenidad" durante el debate, consciente de las disputas que ya han generado otras medidas como la aprobación del matrimonio homosexual. Castaner ha llamado a todas las partes a no caer en posiciones "demasiado cerradas y dogmáticas".