"Las familias han pasado semanas en condiciones terribles desde que huyeron del estado de Rajine", ha asegurado el director médico del nuevo hospital, Pentti Haatanen. Este hospital --situado entre Kutupalong y Mainnerghona-- tiene el tamaño de dos campos de fútbol, cuenta con 60 camas, tres salas, un quirófano, una sala de parto en la zona de maternidad, un ambulatorio, una sala de aislamiento y, además, ofrece servicios de apoyo psicosocial.
Haatanen ha explicado que el personal sanitario se está preparando para atender a estas personas dentro del "amplio espectro de problemas sanitarios" que se les presente, desde personas que lleguen al hospital con heridas que se hayan hecho durante el viaje, hasta aquellas que lleguen con partos complicados, por ejemplo.
"También existe un riesgo muy real de que se produzca un brote de enfermedades transmitidas por el agua. La unidad de aislamiento del hospital nos ayudará a hacer frente a esta situación si sucede lo peor", ha añadido Haatanen.
El hospital, que está gestionado por la Cruz Roja de Noruega y Finlandia, estará formado por personal sanitario bangladesí, entre ellos 15 médicos y 30 matronas pertenecientes a la Sociedad de la Media Luna Roja nacional, así como por 30 miembros de un equipo internacional.
El secretario general de la Sociedad de la Media Luna Roja en Bangladesh, Mozharul Huq, ha declarado que se trata del "primer hospital de pleno funcionamiento cerca de los campamentos".
Asimismo, ha subrayado que este hospital servirá de apoyo al trabajo de los equipos móviles de la Media Luna Roja y a otras clínicas que ahora "podrán remitir más casos complicados a este hospital especializado". Desde el 25 de agosto, los equipos móviles de la Media Luna Roja han tratado a más de 6.000 personas.
Más de 500.000 personas están viviendo en la zona de Cox's Bazar sin acceso adecuado a agua potable, ni a la suficiente comida o a un lugar seguro donde poder dormir, lo que está agravando las necesidades sanitarias en los campos y en los asentamientos improvisados.
La Media Luna Roja es la principal organización humanitaria del país y cuenta con una gran presencia en Cox's Bazar. La ONG trabaja de cerca con el Gobierno de Bangladesh y con otros miembros de Cruz Roja que participan en esta labor humanitaria, entre los que se incluyen organismos como Naciones Unidas. La FICR ha solicitado unos 11 millones de euros para apoyar este proyecto ya en marcha.