Este domingo, el secretario de Estado John Kerry ha desvelado que los servicios de espionaje de EEUU tienen un nuevo indicio sobre el ataque químico que se cobró la vida de al menos 1.429 personas al este de Damasco. "Permítame añadir, esta mañana un importantísimo avance, que en las últimas 24 horas hemos tenido conocimiento mediante muestras ya analizadas por los Estados Unidos y obtenidas de los equipos de emergencia tras el ataque en el este de Damasco. Las muestras de pelo y sangre analizadas han dado positivo para trazas de gas sarín. Por eso este asunto tiene una base y tendrá una base sólida y no creo que mis antiguos camaradas en el Senado y el Congreso den la espalda a todos nuestros intereses, a la credibilidad de nuestro país, al respeto hacia el cumplimiento de la norma que prohíbe el uso de armas químicas y que lleva vigente desde 1925".
Kerry ha asegurado que estas muestras fueron recogidas por agentes "independientes" y que se ha conservado la "cadena de custodia apropiada".