Corea del Norte y Alemania, en la agenda de Trump

Pilar García de la Granja 17/03/2017 14:05

Los Países Bajos son fundadores de la Unión. En la agenda de ambos mandatarios está desde el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europa, que Trump está decidido a cancelar para firmar “acuerdos comerciales bilaterales”, hasta la relación de Estados Unidos con Rusia y Alemania con Rusia.

Donald Trump está convencido de que la “globalización” ha sido perjudicial para Estados Unidos, el empleo y la creación de riqueza en las clases medias - sus principales aliados en las elecciones- y por lo tanto acabar con los Tratados que él considera “injustos” es su primera prioridad. Lo hizo con el Tratado de Libre Comercio para Asia Pacífico, lo ha hecho también con el Tratado de Libre Comercio para América del Norte (NAFTA) y ahora llega darle la puntilla a las negociaciones con la Unión Europa. Sobre todo tras el Brexit, y anunciar como principal aliado comercial de Estados Unidos durante los próximos años al Reino Unido.

Además Donald Trump quiere que los países europeos inviertan más dinero en defensa y en la OTAN, y que esta organización se transforme en la líder mundial de la lucha contra el terrorismo yihadista en Occidente. Trump cree que la OTAN se ha quedado “desfasada” que la relación con Rusia no es de “guerra fría” como se entendía hace décadas y que con respecto de éste país hay que incrementar la inversión en ciberseguiridad y servicios de inteligencia.

Angela Merkel llega a Washington con la intención de convencer a Donald Trump de que Europa es “un todo”, y que es un aliado fiel de los Estados Unidos en todos los sentidos. Le pedirá ayuda para mantener las relaciones comerciales, la política monetaria coordinada y las ayudas al desarrollo en los países más desfavorecidos. Esas ayudas que, según los presupuestos de la Casa Blanca se van a reducir en torno a un 40 %. Merkel además tiene en su agenda la lucha contra el terrorismo islámico, darle una salida coordinada a la situación en Siria y hablar de la política de inmigración respecto de los refugiados politicos, esos que Trump pretende prohibir la entrada en Estados Unidos y que, según Tribunal Federal le ha paralizado.

Y en la agenda de ambos mandatarios también Corea del Norte y la creciente tensión en la zona. Este viernes Tillerson, el Secretario de Estado ha anunciado que Estados Unidos está dispuesto a intervenir - se entiende que militarmente- si Corea del Norte mantiene sus amenazas. “la intervención militar es una opción que está encima de la mesa”. De momento lo que hay son posibles sanciones a empresas chinas que hagan negocios con el regimen de Pionyang.