El Ministerio del Interior ha indicado en un comunicado que la célula era "peligrosa", agregando que los detenidos preparaban atentados en esta misma localidad, según ha informado la agencia estatal marroquí de noticias, MAP.
Las operaciones se han saldado con la incautación de armas blancas, entre ellas hachas y cuchillos, así como documentos en los que se hacía apología de Estado Islámico y equipos electrónicos.
La operación ha tenido lugar dos días después de que fueran detenidas seis personas sospechosas de estar vinculadas con una célula terrorista vinculada al grupo yihadista desarticulada el 14 de octubre en el país.
La Oficina Central de Investigaciones Judiciales detalló el lunes que las detenciones tuvieron lugar a lo largo de la última semana en la capital, Rabat, y las localidades de Beni Melal (centro) y El Yadida --al sur de Casablanca--.
El Ministerio del Interior indicó entonces que los detenidos son sospechosos de participar en "los planes terroristas de la célula de Estado Islámico desmantelada el 14 de octubre, que pretendía atentar contra la seguridad y la estabilidad del Reino".
Las autoridades marroquíes aseguraron el 14 de octubre que la célula desmantelada planeaba atentados en las localidades de Fez, Mequínez, Juribga, Casablanca, Zauiat Cheij, Sidi Benur, Demnate y Sidi Harazem.
Al menos once personas, incluyendo al que sería el autor intelectual de la organización, fueron arrestadas en un piso franco donde se hallaron tres pistolas, dos escopetas, materiales para fabricar cinturones suicidas, y productos químicos que podrían utilizarse para fabricar explosivos.
Otros materiales de los que se incautaron las autoridades son varios cuchillos, un "vehículo sospechoso", munición, clavos, cables y "líquidos sospechosos" según un comunicado del Ministerio del Interior marroquí.
El Gobierno afirmó entonces que los detenidos, entre quienes se encontraría un experto en explosivos, estaban "planeando llevar a cabo operaciones terroristas peligrosas en lugares sensibles" en nombre de Estado Islámico.
Las autoridades marroquíes han confirmado el desmantelamiento de decenas de células yihadistas desde 2002, y unas 50 de ellas tenían vínculos con Estado Islámico.