Seis personas han muerto este miércoles en el ataque perpetrado por los talibán afganos con un coche bomba en el este de Kabul, según ha informado Sediq Sediqqi, portavoz del Ministerio de Interior de Afganistán. Sediqqi ha apuntado que un terrorista suicida ha hecho chocar un coche cargado de explosivos contra un muro de Kabul.
El jefe de Policía Ayub Salangi ha elevado el número de fallecidos a seis, indicando que se trata de un guardia de seguridad y de cinco civiles.
Por su parte, un funcionario del Ministerio de Sanidad ha añadido al balance de víctimas 17 heridos, aunque no ha especificado si son miembros de las fuerzas de seguridad o civiles, ni su estado de salud.
Según Salangi, el ataque se ha producido en la carretera de Jalalabad, que conecta la capital con el este del país, y tenía como objetivo un complejo residencial para occidentales conocido como 'Villa Verde'.
Los talibán afganos han reivindicado la autoría del ataque, explicando que un muyahidin ha hecho explotar su coche frente a una base militar y que otro se encuentra en el interior de la misma luchando contra "el enemigo".
No obstante, el portavoz del Ministerio de Interior ha aclarado que había solo un atacante, desmintiendo con ello lo indicado por el grupo insurgente.
Un testigo ha informado a la agencia de noticias Reuters de que se ha producido una segunda explosión en la capital afgana. De momento, no hay confirmación oficial de este extremo.
En este contexto, la Embajada de Estados Unidos en Kabul, ubicada en el centro de la ciudad, al igual que la mayoría de las sedes diplomáticas, ha emitido una alerta para sus empleados recomendándoles que permanezcan alejados de las ventanas y que se pongan a cubierto.
El ataque se ha producido horas después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, abandonara la base aérea de Bagram, ubicada a las afueras de Kabul, en una visita sorpresa que ha realizado a las tropas estadounidenses desplegadas en Afganistán.