Además ha apelado al respeto del Derecho internacional humanitario y ha reclamado el acceso "sin restricciones" de la ayuda humanitaria y cooperantes a la zona, para dar apoyo a la población más vulnerable atrapada en el estado de Rajine, estimada en cerca de 350.000 personas.
Stylianides ha avisado de que la situación humanitaria ya es "grave" y que puede empeorar si no se permite la entrada de la ayuda.
Bruselas también ha pedido a Bangladesh, país fronterizo, que los desplazados que huyen a su territorio "no sean rechazados ni deportados", porque la protección de estos nuevos refugiados es "esencial" hasta que se estabilice la situación en Rajine y puedan volver a sus hogares.
"Apreciamos enormemente la hospitalidad que el Gobierno y pueblo de Bangladesh han ofrecido durante décadas", ha reconocido el comisario en su declaración.
La Unión Europea mantiene su compromiso de apoyar todos los esfuerzos que permitan el envío de ayuda humanitaria a la zona, aunque no ha aclarado si contemplaría suspender la ayuda a Birmania si se mantienen los obstáculos en Rajine.