Acude al médico por un dolor de estómago y le diagnostican cáncer de ovario en estadio III

Noticias Cuatro 02/10/2017 10:49

Nicola Jones fue por primera vez al hospital el pasado mes de octubre después de sufrir calambres, molestias abdominales y deseos frecuentes de orinar.

Los médicos le hicieron una analítica y comprobaron los altos niveles de celúlas vinculadas con el cáncer de ovario.

Le realizaron un ultrasonido inmediato en el que apreciaron un bulto, aunque "yo no estaba demasiado preocupada en un primer momento pensando que podría ser un quiste", según contó Jones al periódico Liverpool Echo.

El ultrasonido reveló que el quiste era grande y que presionaba uno de los riñones de la mujer de 31 años.

"El médico dijo que parecía un quiste complejo para alguien de mi edad, aunque me advirtieron que tenían una leve sospecha de que podría ser canceroso".

El diagnóstico fue terrible para Jones: Sufría un cáncer de ovario en estadio III que se había extendido a la vejiga y al útero.

Nicola Jones fue operada para extirparle el tumor del ovario y se sometió a un tratamiento de quimioterapia.

"El cáncer de ovario en etapa tardía se clasifica como 'incurable'; así que a pesar de que ha sido extirpado un 95% existe la posibilidad de que regrese.

"El cáncer de ovario en etapa tardía se clasifica como 'incurable', así que a pesar de que se ha ido ahora existe la posibilidad de que vuelva, explicó Jones.

Jones fue sometida a una segunda cirugía para asegurarse de que cualquier rastros de cáncer había sido extirpado.

Después de varios ciclos de quimioterapia, el último en el mes de junio, la joven se está recuperando y los médicos le han asegurado que no tiene rastro de células cancerígenas en su cuerpo.

La mujer se lamenta de que sus planes de familia, tras la histerectomía se han malogrado, pero su pareja y ella al final saben que lo más importante era salvar su vida.