EEUU y Corea del Sur inician sus discusiones sobre el escudo antimisiles

Noticias Cuatro/Agencias 04/03/2016 07:27

El grupo de trabajo conjunto, encabezado por el director general del Ministerio de Defensa de Corea del Sur, Jang Kyund Soo, y el jefe de las Fuerzas de Estados Unidos en Corea, Robert Hedelund, celebrará su primera reunión durante la jornada.

Ambos países anunciaron en febrero que empezarían a debatir el despliegue del sistema antimisiles, después de los ensayos nuclear y balístico llevados a cabo por Corea del Norte.

"Corea del Norte ha continuado sus pruebas nucleares y provocaciones con misiles de largo alcance, y ha desafiado los esfuerzos disuasorios de Corea del Sur y la comunidad internacional", ha dicho Seúl a través de un comunicado.

"El sistema (antimisiles) THAAD será operado por las Fuerzas de Estados Unidos en Corea y contribuirá a la defensa de Corea del Sur ante las crecientes amenazas nucleares y balísticas por parte de Corea del Norte", ha agregado.

Sin embargo, el despliegue cuenta con críticos en el interior del país, y los residentes de las ciudades propuestas como lugares en los que alojar el sistema han expresado mayoritariamente su rechazo a tal posibilidad, tal y como ha recogido la agencia surcoreana de noticias Yonhap.

Además, China ha expresado su rechazo frontal al despliegue, recalcando que se opone al incremento de la presencia militar de Estados Unidos en la península, que considera una amenaza para su seguridad nacional.

LOS ÚLTIMOS ENSAYOS

El Gobierno de Kim Jong Un llevó a cabo el 6 de enero una prueba con una bomba de hidrógeno y el 7 de febrero lanzó un satélite de observación terrestre con tecnología de misiles balísticos, saltándose así las resoluciones que le prohíben expresamente hacer estos ensayos.

En respuesta, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó el miércoles un nuevo paquete de sanciones contra el país asiático, a lo que Pyongyang respondió disparando horas después seis proyectiles de corto alcance al mar de Japón.

Corea del Norte justifica su escalada nuclear y militar por la necesidad de defenderse de lo que considera movimientos provocadores de Corea del Sur y Estados Unidos.

Las dos Coreas siguen técnicamente en guerra porque solamente firmaron un armisticio para cesar indefinidamente las hostilidades después de enfrentarse entre 1950 y 1953.