El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha definido el acuerdo alcanzado en torno a la lucha contra ETA con el lehendakari, Patxi López, con una frase: "Dos gobiernos y una misma política antiterrorista".
Tras más de dos horas de reunión en la Moncloa, ambos mandatarios han comparecido en rueda de prensa en los jardines del palacio. Zapatero, que ha destacado que se trata de una "reunión especial", ha atribuido el carácter distintivo de esta reunión a que se trata del "primer encuentro con el lehendakari del cambio y la esperanza".
Juntos, contra ETA
Sobre el contenido de la reunión, ha explicado que se han abordado tres grandes cuestiones. La primera de ellas, la lucha contra ETA. Ambos mandatarios han afirmado que comparten "una misma política para erradicar la violencia de ETA, apoyar a las víctimas y unir a los demócratas contra el terrorismo". A lo que Zapatero ha querido añadir que "el liderazgo de López está siendo fundamental en esta línea".
En torno a la crisis económica, el segundo punto tratado en el encuentro, Zapatero se ha referido a la cooperación en torno al desarrollo de infraestructuras importantes para Euskadi como la Alta Velocidad y otros proyectos de I+D "que pongan en valor e incrementen la capacidad de innovación de la sociedad vasca para salir de la crisis".
Sobre las transferencias pendientes al Gobierno vasco, el tercer gran bloque abordado por ambos mandatarios, el presidente del Gobierno se ha comprometido a otorgar "el máximo impulso y celeridad" al traspaso de las políticas activas de empleo, previsto para el 1 de enero de 2010, y a otras competencias recogidas en el Estatuto de Gernika.
"Mereció la pena"
Sobre la posición del PNV tras la elección de López, el presidente del Gobierno ha asegurado que "es conocido que el PNV ha decidido que la consecuencia de que Patxi López sea lehendakari es hacer una constante oposición". Zapatero ha afirmado respetar la posición de los nacionalistas "ya que esas son las reglas del juego".
"Pero puedo asegurar que merece la pena, merece tanto la pena que eso sea por tener un lehendakari como Patxi López y lo que eso significa para la democracia, para España y para Euskadi que sinceramente no me produce mayor perturbación", ha concluído.