El equipo desplegado en el centro de tratamiento de residuos de la Mancomunidad de Los Alcores, ubicado en la hacienda Montemarta-Cónica de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), ha dado por finalizada la búsqueda del cadáver de la joven sevillana Marta del Castillo en este enclave sin haber localizado "nada" relativo al crimen desde que comenzaran los trabajos el pasado 20 de marzo.
El padre de la joven, Antonio del Castillo, ha revelado el repliegue del dispositivo tras haber sido informado previamente por la Policía Nacional.
No hay indicios
Antonio del Castillo ha comunicado que el miércoles se reunió con los responsables del Cuerpo Nacional de Policía que coordinan la investigación correspondiente al crimen de su hija, por cuya muerte están imputados su ex novio Miguel C.D., el hermano de éste Javier Delgado, su amigo Samuel B.P. y el menor de edad conocido como 'El Cuco'.
En tal encuentro, la Policía Nacional le avanzó que la búsqueda del cadáver en el vertedero de la Mancomunidad de Los Alcores finalizaría este jueves en el caso de que tampoco se hallasen indicios algunos de que el cuerpo descanse entre los residuos de este centro de tratamiento.
"En manos del juez"
Según ha explicado el padre de Marta del Castillo, la joven desaparecida la noche del pasado 24 de enero tras haberse citado con su ex novio Miguel Carcaño, el destino del caso "queda en manos del juez", ya que "tendrá que llamar a declarar" otra vez a "todos estos personajes", en alusión a los imputados.
Cabe recordar, en ese sentido, que la búsqueda de los restos mortales de Marta del Castillo en el centro de tratamiento de residuos responde a laúltima versión defendida por Miguel Carcaño en cuanto a la muerte de la joven en la vivienda de su ex novio.
El principal imputado negó que el cadáver hubiera sido arrojado al río Guadalquivir desde la pasarela de transporte público que conduce al municipio de Camas.
En concreto, Miguel dio un giro a su versión de los hechos revelando que 'El Cuco' y él mismo sometieron a la joven a abusos sexuales y, tras darle muerte, depositaron el cadáver en un contenedor de residuos urbanos situado en la confluencia de la calle León XIII con la calle Jorge de Montemayor, lo que habría ocasionado que el cuerpo fuera recogido por uno de los camiones de Limpieza Pública de Sevilla (Lipasam).