El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha reivindicado una Administración de Justicia "propia" y la transferencia de la competencia de prisiones a la Comunidad Autónoma Vasca, durante la apertura del curso judicial desarrollada este lunes en Bilbao. Además, ha afirmado que "se vive un nuevo tiempo político que exige altura de miras" y ha abogado por el diálogo y los acuerdos estables, ahora que se inicia una nueva legislatura.
Al acto han asistido, además de los máximos representantes de la Judicatura, la Fiscalía y la Abogacía vasca, representantes institucionales y de todos los partidos políticos. En esta ocasión, se ha sumado EH Bildu, que es la primera vez que acude a la recepción de la apertura del año judicial.
Entre otros, han estado presentes la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejeria, el diputado general de Vizcaya, Unai Rementeria, el alcalde de Bilbao, Juan María Aburto, los consejeros Josu Erkoreka y Estefanía Beltrán de Heredia, el exlehendakari José Ardanza y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo.
Además de los representantes institucionales, han participado en el acto Iñigo Iturrate (PNV), Julen Arzuaga y Jone Goirizelaia (EH Bildu), José Antonio Pastor y Tontxu Rodríguez (PSE), Alfonso Alonso (PP) o Cristina Makazaga (Elkarrekin Podemos).
En su intervención, el lehendakari ha asegurado que el Ejecutivo vasco inicia la nueva legislatura "con ilusión y compromiso", y ha destacado que "se vive un nuevo tiempo político que exige altura de miras".
"Necesitamos abrir un nuevo espacio que posibilite un diálogo constante, imprescindible para alcanzar acuerdos estables, colaboración permanente para no incurrir en disfunciones, y respeto mutuo imprescindible para crear un clima de confianza", ha manifestado.
En su opinión, desde estos principios "se pueden abordar todos los objetivos de esta legislatura". Además, ha destacado la necesidad de la transferencia en materia de Instituciones Penitenciarias, "recogida explícitamente en el Estatuto de Gernika".
También ha considerado que ésta es también "una buena ocasión" para "volver a poner sobre la mesa la necesidad de adecuar el actual marco competencial en materia de Justicia a la realidad política del autogobierno vasco". "No vamos a cejar en el empeño, y vamos a seguir trabajando para lograr dar respuesta a la legítima aspiración de contar con nuestra propia Administración de Justicia", ha añadido.
Para Iñigo Urkullu, ésta es "una aspiración perfectamente compatible con una actuación presidida por el diálogo, la colaboración y la lealtad, en aras a prestar el mejor servicio a la ciudadanía".
El máximo representante del Gobierno vasco ha apelado al "espíritu del pacto" del lehendakari José Antonio Agirre y del primer Gobierno vasco, cuyo 80 aniversario se conmemora estos días. "En estos momentos en que la política es cuestionada, debemos reivindicar su auténtica naturaleza. La política, en esencia, tiene la encomienda de hacer posible lo que, de entrada, parece imposible", ha añadido.
En su opinión, "ello requiere superar visiones cortoplacistas e interesadas para abordar los retos de la sociedad del siglo XXI con la mirada puesta en las necesidades de las personas y su convivencia en el medio y largo plazo". "Ésa es nuestra responsabilidad", ha asegurado.
Por ello, ha apelado a "los valores de diálogo y colaboración que representa" el primer Ejecutivo vasco. "Estos valores deben ser el eje vertebrador de la actuación política y, de forma particularmente intensa, en el ámbito de la Justicia", ha apuntado.
LA JUSTICIA
Asimismo, ha destacado que existe "la responsabilidad compartida" de conseguir "que la Justicia siga siendo un instrumento valioso para la convivencia social". "En una sociedad avanzada, la Administración de Justicia es un pilar básico de la convivencia, es la garantía del ejercicio de nuestros derechos", ha añadido.
Por ello, ha afirmado que hoy, aunque siendo un Gobierno en funciones, se renueva su "compromiso con las personas en el ámbito del acceso a la Justicia, y muy especialmente, con las más necesitadas", a quienes ha ofrecido "la garantía de servicio público".
Iñigo Urkullu ha afirmado que "los indicadores objetivos avalan una buena situación de la Justicia en Euskadi" y considera que estos datos son "un acicate para seguir colaborando y trabajando juntos en la mejora de este servicios esencial".
De esta forma, se marca como "retos principales" ganar en agilidad; avanzar en la digitalización; mejorar el modelo de 'Justicia juvenil', "un referente en el Estado"; extender los nuevos métodos de Justicia restaurativa, Mediación Intrajudicial y Derecho colaborativo; garantizar el derecho de la ciudadanía a la opción de lengua en sus relaciones con la Justicia, y apostar por políticas de reinserción sociolaboral de los presos una vez excarcelados.