Rajoy ha advertido de que "nadie saldría beneficiado" de unas terceras elecciones, recalcando que el Gobierno que preside está en funciones desde hace unos 300 días, de forma que "no puede tomar las decisiones importantes que requiere nuestro país", proclamando que "ya hemos tenido suficiente y lo lógico, lo sensato, lo razonable y lo que demandan la mayoría de los españoles es que las cosas vuelvan a la normalidad".
Durante su intervención también ha dicho lo siguiente: "Yo voy a hacer una política de luces largas y mirando al futuro y estoy esperanzado de que los demás también lo hagan".
Ha hecho notar que el PP ha trabajado desde los comicios del 20 de diciembre "para evitar a toda costa unas elecciones", insistiendo en que "ahora mismo, lo más importante en España es formar Gobierno urgentemente".
Por otra parte, ha aseverado que "la aportación del radicalismo y los aficionados a la política es siempre la misma: inestabilidad, retroceso en todos los órdenes y paralización del funcionamiento normal de la economía y las instituciones", lo que Rajoy espera que "en España no vuelva a suceder", proponiendo volver "al sentido común y la razón".
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