El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha defendido este martes que en una eventual Cataluña independiente los derechos lingüísticos tienen que ser "escrupulosamente respetados".
En un chat con la ciudadanía en Facebook Live recogido por Europa Press, ha explicado que en caso de independencia los derechos lingüísticos "no pueden retroceder", en coherencia con la ley de transitoriedad jurídica presentada el lunes que recoge la cooficialidad de castellano y catalán.
"Especialmente, ante los catalanes que tienen el castellano como primera lengua", ha dicho, aunque ha advertido de que hay que defender el catalán en aquellos ámbitos en los que es minoritario, como el cine.
Puigdemont ha afirmado que los catalanes podrán votar el 1 de octubre para decidir su futuro y el Gobierno no podrá "parar" el referéndum porque esa decisión sólo está al alcance de los ciudadanos.
En respuesta a otra pregunta, Puigdemont ha afirmado que el Gobierno de la Generalitat convoca a los catalanes al referéndum del 1-O y no a todos los españoles porque no ha llegado ninguna propuesta desde el Estado: "Tampoco sobre que pueda votar toda España".
También ha afirmado que es trabajo del Ejecutivo que lidera que los catalanes puedan expresarse en las urnas, también aquellos que optarían por el 'no' a la independencia.
Ha asegurado que la gente responde cuando el ciudadano es consiente de que la decisión está en sus manos y no en las de los políticos, por lo que espera una amplia participación de todos los espectros en Cataluña: "Quien les garantiza que pueden votar somos nosotros. El Gobierno de España no se lo garantizará".
Preguntado por si se habría llegado al punto actual si se hubiera mantenido el Estatuto tal y como se refrendó en Cataluña o si el Estado hubiese aceptado la propuesta catalana de conseguir un pacto fiscal, Puigdemont ha contestado: "Probablemente no. El Estado no ha pensado bien lo que representaron esos gravísimos errores".