García Carnero ha anunciado esta moción coincidiendo con la reunión que ha mantenido con Rosaura Valentini, esposa de Yon Goicoechea, opositor venezolano de origen vasco encarcelado el pasado mes de agosto, a la que ha entregado una copia de la moción. Asimismo, el PP ha invitado a Valentini a estar presente en el hemiciclo en el debate de la próxima semana.
La moción va en sintonía con las demandas que los grupos de oposición venezolanos exigen al Gobierno de Nicolás Maduro, ha señalado el PP en un comunicado. De esta forma, exige al Gobierno venezolano la liberación de los presos políticos, pide que le sean restituidas todas las competencias a la Asamblea Nacional y demanda la celebración de elecciones.
Además, la iniciativa también solicita que Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA) puedan, de manera inmediata, enviar observadores especialistas en ese campo a Venezuela, para que determinen el alcance de la crisis que vive el país. De esta forma, se puedan establecer los canales necesarios para trasladar de manera inmediata alimentos y medicinas.
Según ha recordado el senador, esta es la 53ª iniciativa que el grupo popular lleva a la Cámara Alta desde 2004, por lo que pone de manifiesto que la causa del PP con Venezuela "no es reciente". García Carnero ha puesto de relevancia que el debate de la moción en el Pleno obligará a todos los grupos a pronunciarse.
En una sesión a principios de mes Podemos, ERC y Grupo Mixto se desmarcaron de una declaración institucional conjunta de todos los grupos del Senado, en esta se exigía la liberación de los presos políticos en Venezuela, y se expresaba la preocupación y solidaridad con la Asamblea Nacional y el pueblo de Venezuela por la situación política del país.
Los senadores firmantes del Grupo Popular, el Grupo Socialista y el Grupo Vasco, manifestaron su "profunda preocupación por la situación en Venezuela" tras las últimas decisiones del Gobierno venezolano de Nicolás Maduro". El texto manifestaba el convencimiento de los senadores de que "solo un diálogo urgente, inclusivo y basado en el sincero reconocimiento mutuo de los distintos actores políticos será efectiva para solucionar los problemas de Venezuela, y permitirá avanzar en la consecución de la paz social, la estabilidad política e institucional, con pleno derecho a la democracia y el respeto a los "Derechos Humanos"".