Si García-Margallo y Fernández Díaz, que fueron cabezas de lista por Alicante y Barcelona en las elecciones del pasado 26 de junio, no son nombrados para otro cargo y continúan en la Cámara, la idea de la dirección del Grupo Popular es compensar su salida del Ejecutivo con un puesto de relevancia como una Presidencia de Comisión.
De entrada, las Cortes Generales tienen pendientes de constituir las Comisiones Mixtas (Congreso-Senado) y, por ende, debe elegir a sus presidentes. Una de ellas, la de Seguridad Nacional, estaba reservada para María Dolores de Cospedal, que ya la presidió la pasada legislatura y que ahora ha sido nombrada ministra de Defensa.
Además, la designación de Juan Ignacio Zoido como ministro del Interior deja en el aire la Presidencia de la Comisión Constitucional, una de las comisiones más relevantes de la Cámara y donde habría que canalizar, si se emprende, la reforma de la Carta Magna.
LOS CAMBIOS, EN UNAS DOS SEMANAS
Y también quedará una vacante en la dirección del Grupo Popular, la que deja la catalana Dolors Montserrat, que a partir de ahora se desempeñará como ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
En todo caso, el Grupo Popular esperará a conocer la segunda tanda de nombramientos del Gobierno (los secretarios de Estado y subsecretarios) antes de acometer estos relevos. Su portavoz, Rafael Hernando, ha comentado a los periodistas que en "dos semanas" podría ya tener diseñado su organigrama definitivo.