Mientras un avión de Salvamento Marítimo vigila la mancha de fuel de 12 kilómetros que flota en la zona del hundimiento del pesquero ruso, la Fiscalía de Las Palmas ha incoado diligencias de investigación para determinar si existe delito contra el medio ambiente en lo ocurrido. Greenpeace ha pedido la extracción del combustible para evitar un desastre.