Más de 150 parlamentarios del Consejo de Europa piden formalmente destituir a Agramunt como presidente de la Asamblea

EUROPA PRESS 30/06/2017 15:49

Un total de 158 miembros de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa han presentado este viernes una moción para destituir como presidente de ese órgano al senador 'popular' Pedro Agramunt, criticado desde que el pasdo marzo participó en un viaje a Siria que inluyó una reunión con Bashar al Assad.

Según ha informado la institución, la moción se ha presentado conforme a la reforma del reglamento que se aprobó este mismo martes para abrir la puerta a la destitución del presidente. Conforme a las nuevas reglas, los parlamentarios que firman la moción son de cinco grupos políticos y 36 países diferentes.

No obstante, la destitución no podrá votarse hasta la próxima sesión parlamentaria, que tendrá lugar entre el 9 y el 13 de octubre. La Asamblea aclara que, hasta que se tome una decisión final, Agramunt dejará de presidir las reuniones de la Asamblea y que el procedimiento terminaría si presentase su dimisión voluntariamente.

Los firmantes consideran "que el presidente de la Asamblea Parlamentaria ya no cuenta con la confianza de la Asamblea porque su comportamiento daña seriamente la reputación de la Asamblea y mancha su imagen".

Sin embargo, poco antes de que se conociese la presentación de la moción, el senador ha emitido un comunicado afirmando que se siente "víctima" de una "cruzada" por defender el diálogo para poner fin a la guerra en Siria, y ha añadido que su posición en este conflicto es "idéntica" a la del presidente francés, Emmanuel Macron.

AGRAMUNT CULPA A UCRANIA Y A LA IZQUIERDA

En un comunicado, Agramunt ha culpado de los intentos de destituirle a la delegación de Ucrania en la Asamblea, "por razones de su interés nacional contra Rusia, y por los socialistas y la extrema izquierda, por razones de oportunidad política, y por tanto partidista, por la sencilla satisfacción de derribar a un Presidente del PPE". A ello, ha dicho, ha colaborado "el Secretariado de la Asamblea".

El descontento con Agramunt tiene su origen un viaje a Siria que realizó el pasado mes de marzo --junto con otros dos parlamentarios, uno de ellos el del PDeCAT Jordi Xuclà--. En su comunicado, explica que la visita fue a invitación de la presidenta del Parlamento sirio, Hadieh Abbas y "estrictamente motivada por una idea de apertura y de paz".

El senador alega que su defensa de los Derechos Humanos le ha llevado a visitar numerosos países en conflicto, porque está convencido de que "ningún proceso de paz se puede llevar a cabo sin la implicación de todas las partes concernidas".

Agramunt admite que pocos días después de su visita "se produjeron los bombardeos con sustancias químicas", ataques que inmediatamente condenó. "Estos atroces bombardeos nada tuvieron que ver con mi misión de paz que se produjo apenas unos días antes pero contribuyeron sin duda a dar una mala imagen de mi misión", admite.

No obstante, señala que mientras él estaa en Siria, altos funcionarios de la Oficina de la Alta Representante de la Unión Europea, Mrs Federica Mogherini se sentaban en una mesa redonda en Ginebra para discutir con representantes de alto nivel de las autoridades sirias y el enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, también mantenía negociaciones.

Además, sostiene que su posición es similar a la que ha expresado el presidente francés, Emmanuel Macron, y que otros líderes de todo el mundo "han declarado igualmente que es necesario incluir a todas las partes en las conversaciones, incluidas las autoridades sirias actualmente en el poder", y que "todas estas declaraciones fueron bien recibidas por la comunidad internacional".

Pese a ello, ha denunciado que hay miembros de la Asamblea que "se han aprovechado y abusado de estas circunstancias para lanzar una cruzada". A su juicio, esa "cruzada" se debe a que él defiende "el diálogo constructivo con todos los países, incluido Rusia, que es miembro del Consejo de Europa, pero no está representado en el seno de la Asamblea desde hace un año y medio".

"Políticamente, los parlamentarios ucranianos con sus slogans simplistas y los socialistas y extrema izquierda con su agenda secreta han visto una excelente oportunidad para atacarme por mis iniciativas de diálogo con el objetivo de debilitarme y ajustar cuentas", ha lamentado.

Agramunt ha denunciado que la reforma del reglamento que se ha aprobado para permitir su destitución supone "manipular las reglas de la asamblea" y "retorcer los principios del Estado de Derecho", porque permite ser aplicada de manera retroactiva. Según fuentes de su entorno, el senador está estudiando impugnar la reforma por la vía legal.