En un comunicado con motivo de la Diada que se celebra el lunes, ha calificado la estrategia independentista para aprobar las leyes del referéndum y de transitoriedad de "vulneración flagrante de los procedimientos parlamentarios y de los derechos de los diputados de la oposición nunca vista en democracia".
Añade que palabras como 'democracia', 'libertad', 'derechos', 'nación' y 'urnas' "no se pueden convertir en armas arrojadizas de unos contra otros, como si solo una parte de la sociedad fuera demócrata", y ha apelado al diálogo, la negociación y el pacto.
"¿Quién puede dudar que vivimos en una sociedad democrática, en un Estado de derecho, que ampara la libertad y los derechos de todos?", se ha preguntado el expresidente, que también avisa de que la acción del Govern pone en riesgo la unidad social y agudiza la desafección.
De hecho, argumenta que "cuando el Govern afirma que está dispuesto a situarse fuera de la ley, el mensaje que se envía a una parte muy importante de la ciudadanía es que no reconozca la autoridad política", legal ni moral de la institución.
"Hacer las cosas así no nos lleva a ninguna solución; más bien al contrario, hace que sea más difícil conseguirla", ha lamentado, y ha reivindicado que no se politice la Diada.