La 'Diada del Sí', símbolo de un auténtico desafío al Estado y las instituciones

EUROPA PRESS 12/09/2017 05:16

Esta Diada “no es una Diada cualquiera”. Lo aseguraba el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont en su discurso institucional, y la tormenta política de las últimas semanas lo ha evidenciado. En esta Diada hay una ley de referéndum aprobada en un Parlamento convulso y con la oposición estupefacta.

El mismo mensaje lo pronunciaba ERC a través del vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras: “Un paso más en el camino a la nueva república y un paso más hacia la independencia de Cataluña”.

Así, centenares de miles de personas llenaron el Paseo de Gracia y la calle Aragón de Barcelona este 11 de septiembre, Diada de Cataluña, en la manifestación independentista organizada por la ANC,

Músicos, castellers y gigantes amenizaron en distintos puntos de la cruz independentista que se ha conformado en el Eixample, dividido en distintos tramos en los que los manifestantes acudían en función de su comarca de origen.

Los vendedores ambulantes ofrecían atavíos independentistas, sobre todo pequeñas banderas de plástico, pero también bebidas para afrontar el calor bajo el sol de septiembre; otros, sin embargo, venían preparados de casa con todo tipo de refrigerios en previsión de la temperatura.

Es el caso de un grupo de jóvenes que, en el tramo 101, servían bebidas desde un barril: "Lo hacemos todos los años y este es el último porque el que viene vendremos a celebrar que ya somos independientes", ha relatado uno de ellos.

La ANC pretendía que los manifestantes llegaran vestidos con ropa de calle y que, al paso de unas grandes lonas por su cabeza, se cambiaran la camiseta por la que han diseñado este año, de color amarillo chillón, para que se produjera un efecto a ojos del espectador.

Sin embargo, algunos de los manifestantes no tenían muy claro lo que debían hacer y muchos han vestido el atuendo 'oficial' durante toda la tarde.

Otros aprovecharon ropa que ya tenían de ese color, especialmente camisetas de equipos deportivos locales pero también petos y chalecos reflectantes con el fin de ahorrarse los 15 euros de la equipación de la ANC, que incluía camiseta, bolsa y una vano.

MENOS RUIDO, IGUAL REIVINDICACIÓN

La protesta de este 2017 se ha percibido como menos ruidosa que en ediciones anteriores, puesto que han escaseado los cánticos más allá del tradicional "independencia" y de proclamas asegurando que el 1-O se votará.

Tampoco se han percibido muchas pancartas con mensajes y la gran mayoría de personas portaban banderas 'esteladas', si bien se vieron carteles exigiendo poder votar en el referéndum y apelando al Gobierno, como 'Rajoy, me voy' o 'Soraya Santamaría, Madre de Dios, ruega por nosotros'.