Homs proclama que su suplicatorio demuestra que las apelaciones del Gobierno al diálogo son mera "propaganda"

EUROPA PRESS 22/11/2016 22:08

Así lo ha señalado Homs en la rueda de prensa que ha ofrecido en el Congreso, rodeado de sus compañeros del Partit Demòcrata Europeu Català, tras el debate y la votación "top secret", según sus propias palabras, en la que por 248 votos a favor y 91 en contra se ha dado vía libre al Supremo para investigarle.

A su juicio, este resultado evidencia que el "discurso del diálogo" del que ha hecho gala el Ejecutivo en los últimos días "está vacío". "Es retórica, porque no hay voluntad de hacer frente a la cuestión que se plantea en Cataluña y se excusan en interpretaciones de la ley hecha a conveniencia del Gobierno del PP", ha denunciado.

"NI DIÁLOGO, NI PUÑETAS"

"Ni diálogo, ni puñetas", ha resumido, dando por hecho que la mayoría del Congreso avala que se siga "criminalizando a los adversarios y persiguiéndolos judicialmente, haciendo ver que la iniciativa es de jueces y fiscales, cuando no es verdad".

"Hoy se ha echado un jarro de agua fría a la tercera vía tras días de apelaciones al diálogo", ha remarcado Homs, criticando que esta actitud evidencia que quienes la defienden entienden "Cataluña como un súbdito que tiene que obedecer y no proponer y mucho menos querer votar".

Según Homs, este martes se ha constado que este sector que no quiere afrontar el problema catalán desde la política puede haber "vencido en la votación, pero no convence". Eso sí, ha admitido que las posiciones han sido claras y que no ha habido sorpresas. Así, ha señalado que PP, PSOE y Ciudadanos han dejado patente que este "proceso jurídico" no "merece una atención política" y que "vale la pena seguir la senda de la judicialización de la política catalana".

Por último, Homs se ha congratulado de que la mayoría de los diputados elegidos en las cuatro circunscripciones catalanas han votado en contra del suplicatorio porque consideran que abre la vía a un "juicio político" y que desde la judicialización no se va hacer frente lo que plantea Cataluña porque sólo puede dirimirse en las urnas. "La democracia no es el problema, sino la solución", ha insistido.