En un comunicado, los republicanos alegan que "el nivel de exigencia con la corrupción tiene que ser claro y contundente porque la República Catalana solo se entiende si es limpia y justa", una posición que llega después de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña haya abierto una investigación contra el exconseller por el caso 3%.
La posición de ERC no es la misma que la del PDeCAT pese a que ambos comparten grupo parlamentario en JxSí: ERC pide la dimisión y el PDeCAT ha hecho un comunicado conjunto con Gordó anunciando que dejaba la presidencia de la Comisión pero no el escaño.
ERC cree que Gordó debe abandonar la Cámara por "la relevancia de los hechos investigados y los delitos" de los que se le acusa, y ha admitido que formula esta demanda a riesgo de ser injusta y no suficientemente escrupulosa con la presunción de inocencia.
"Queremos una República limpia, justa y transparente y ahora mismo no nos podemos permitir ni una sombra de sospecha", zanjan desde el partido que lidera Oriol Junqueras.