"Para algunos el acuerdo no es deseado. Quieren ruptura, colisión e impacto, y yo trabajo para lo contrario", ha sostenido en una entrevista en Ràdio 4 recogida por Europa Press, tras asegurar que el independentismo necesita justificar que la solución a los problemas pasa por separarse del resto de España.
Para Millo, los partidarios de un Estado catalán identifican "un enemigo como responsable de todos los males y plagas, y se construye un discurso oficialista en que la solución a todo es la independencia", pero ha asegurado que el Gobierno mantendrá siempre la voluntad de dialogar para intentar evitar que se celebre el referéndum del 1 de octubre.
Pese a todo, ha avisado de que si el Govern "fuerza la máquina y va hasta el final para ejecutar esta ilegalidad, se encontrará con una barrera muy firme del ámbito judicial y del Gobierno" para impedirlo, y también que los dirigentes políticos catalanes que lo hayan ejecutado afrontarán una situación muy grave ante la justicia.
"Los interlocutores del diálogo del Govern deberán ser otros entonces, porque estos habrán quedado políticamente invalidados", ha advertido Millo, que cree que el anuncio del Govern de explicar los detalles técnicos y legales del referéndum en un acto el 4 de julio evidencia que no tienen interés en abordar otros debates y cuestiones que no sea la hoja de ruta independentista.