Crece la tensión entre Reino Unido y España por el conflicto de Gibraltar

Noticias Cuatro 05/08/2013 21:05

Bloques de hormigón para boicotear la pesca española desde Gibraltar y controles exhaustivos en la frontera por parte de España. Los políticos están enrocados cada uno en su lado de la frontera avivando la sensación de malestar y la tensión entre los políticos y ciudadanos de cada región.

Margallo, ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, amenazó ayer con una tasa fronteriza, afirmando: "Se acabó el recreo en Gibraltar".

Sus declaraciones no sentaron bien en el Peñón, desde donde Fabian Picardo, ministro principal de Gibraltar, se criticó: "La entrevista que dio el ministro tiene más de política de Franco que de política de la Europa Moderna".

Mientras, los controles siguen generando numerosos atascos y largas colas de coches que mantienen indignados a sus conductores.

Por su parte, Carmen Crespo, delegada del Gobierno en Andalucía, ha defendido que "lo primero que tienen que hacer es quitar esos bloques de hormigón, permitir a los pescadores que se pesque" y ha recalcado que "el control de la verja es un control que está firmado, que está establecido, y el Gobierno lo que hace es realizarlo de forma exhaustiva".

Todo ello, a pesar de las peticiones de moderación que llegan de todas partes, desde Bruselas, desde la oposición y del Ayuntamiento de la Línea de la Concepción (Cádiz) una de las zonas más afectadas por la situación.

Más de 6.000 trabajadores son los que cada día cruzan a Gibraltar. Cientos de personas se desplazan hasta la Línea con fines turísticos o de trabajo, y como consecuencia de los últimos acontecimientos solo este fin de semana los negocios de la zona han visto bajar sus ventas un 20%.