El Colectivo de Presos de ETA se suma al Acuerdo de Gernika

cuatro.com 23/09/2011 20:29

El Colectivo de Presos de ETA (EPPK) ha anunciado en un comunicado remitido a Gara y Berria que se suma al Acuerdo de Gernika suscrito el pasado año, y en el que se emplazaba a la banda a "un alto el fuego permanente, unilateral y verificable por la comunidad internacional como expresión de voluntad para un definitivo abandono de su actividad armada".

Ambos diarios señalan que el contenido íntegro del comunicado será publicado este próximo sábado. Un día después, los impulsores del Acuerdo de Gernika celebrarán el primer aniversario de este acuerdo en esta localidad vizcaína, en que se un portavoz autorizado hará llegar la postura adoptada por el EPPK (Euskal Preso Polikoen Kolektiboa) previsiblemente mediante la lectura de un comunicado.

Reivindicando el documento se reunirán la treintena de asociaciones, plataformas, sindicatos y partidos políticos de la izquierda abertzale que hace un año suscribieron el acuerdo de Gernika, entre ellos los integrantes de Bildu, EA y Alternatiba y representantes de Batasuna.

El Colectivo de Presos de ETA se pronunciará sobre esta cuestión después de muchos meses de debate en las cárceles donde se ha ido imponiendo la postura a favor de la línea posibilista abierta, primero en Alsasua en noviembre de 2009 y rematada luego con el documento 'Zutik Euskal Herria' y el acuerdo de Gernika.

Ya lo calificaron de "importante" en enero

Prueba de ello fue la carta escrita recientemente por el histórico preso de los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO) Paco Cela Seoane tras coincidir en prisión con un preso de ETA en la que asegura que "ha barrido" la tesis de que "ha fracasado la lucha armada". "A este jamelgo es al que se han aupado los oportunistas, han tomado las riendas, los han puesto al galope y, sencillamente, han barrido", decía este terrorista en su misiva a la que ha tenido acceso Europa Press.

Ya el pasado enero el colectivo de presos de ETA anunció su respaldo al "importante" Acuerdo de Gernika y trasladó su deseo a los firmantes del mismo para sumarse a la interlocución y entablar unas "relaciones normalizadas".

No obstante, el apoyo no es unánime, sino que en algunas cárceles ha generado mucha controversia entre los presos, han apuntado fuentes conocedoras del proceso. Sin embargo, ante la posibilidad de que esta cuestión genere la división entre dos bloques dentro del EPPK, las mismas fuentes no descartan que la habitual disciplina dentro del colectivo lleve a los duros a asumir la opinión mayoritaria.

Asimismo, fuentes de la lucha antiterrorista indican que la adhesión al documento que se anunciará el domingo podría no ser total, sino con matices. Un ejemplo podría ser el de renunciar a los beneficios penitenciarios para los terroristas, una histórica imposición de ETA en las cárceles al considerar que esas medidas son propias de presos comunes y no de presos políticos.

Distancias con nanclares

De este modo, el EPPK marcaría distancias con los presos que cumplen condena en la cárcel alavesa de Nanclares de la Oca que hace años rompieron con su pasado terrorista y con la férrea disciplina de la banda en prisión.

Este mismo viernes, el grupo de presos de Nanclares autodenominado 'Presos comprometidos con el Irreversible Proceso de Paz' ha señalado que "ya es hora de abordar sin dilación el reconocimiento y la reparación de las víctimas y la reconciliación social". Asimismo, han reafirmado su "apuesta inequívoca" por un proceso de paz "irreversible" por lo que ofrecen su "disposición" para "afrontar y alcanzar una convivencia pacífica".

En un comunicado en el que reiteran su "compromiso" con el Acuerdo de Gernika, "en todos y cada uno de sus puntos", el grupo de presos, internos en la cárcel de Nanclares, han señalado que, además de firmar el 'Acuerdo para un escenario de paz y soluciones democráticas', quieren "reivindicar su cumplimiento íntegro sin más demora ya que después de un año, no se ha avanzado en la mayoría de los puntos suscritos".

Otras fuentes consultadas recuerdan que una cosa es lo que piensen los presos en las cárceles españolas y otra la opinión de los presos etarras en Francia donde el debate no es tan fluido ni es mayoritaria la opinión de dejar la violencia.

No piden el final de la violencia

El comunicado por medio del cual el Colectivo de Presos de ETA dice sumarse al Acuerdo de Gernika se limita a manifestar su conformidad con dicho pacto, pero no se refiere en ningún momento a ETA ni pide el final definitivo de la violencia. En su lugar, exige la "amnistía completa" para todos los presos etarras y carga contra la "despreciable" política penitenciaria de España y Francia al tiempo que rechaza la posibilidad de acogerse a beneficios penitenciarios, una posibilidad que sí plantean los firmantes originales del acuerdo.

"Para el EPPK el Acuerdo de Gernika es referente en el Escenario Democrático, y del mismo modo, queremos hacer saber a la sociedad vasca que estamos conformes con el Acuerdo", dicen los presos en este comunicado divulgado hoy en el que se presentan como un agente "imprescindible" a la hora de "lograr una solución para el conflicto".

A partir de ahí, advierten de que son un colectivo que sitúa "más allá de los intereses del individuo" para avisar de que no van aceptar "la solución y la despreciable política personal beneficiosa que "ofrecen" España y Francia en torno al sistema carcelario creado para destruir el carácter político y humano del colectivo".

"Pinchar la cabezonería-ceguera y las actitudes que pretenden estancar el conflicto y lograr un escenario que garantice un futuro libre no son cualquier desafío. Con el convencimiento de que el proceso que tenemos en marcha nos conducirá al cumplimiento, tenemos el compromiso de impulsar el proceso democrático hasta el final. ¡Y lo lograremos!", zanja el comunicado.

Contenido del acuerdo de Gernika

El Acuerdo de Gernika situaba la "amnistía" para "todos los presos políticos vascos" y el establecimiento de una nueva negociación política que termine en la "independencia" como los siguientes puntos recogidos en la hoja de ruta, que previamente se exigía un alto el fuego de ETA, la legalización de una marca electoral con la que poder acudir a las urnas y parar las detenciones.

Este documento fue firmado el pasado 25 de septiembre por las tres formaciones que integran Bildu (EA, Alternatiba y Batasuna) así como varias de la plataformas que han nutrido de independientes las listas de la coalición abertzale. Bajo el título 'Acuerdo para un escenario de paz y soluciones democráticas' se abogaba por establecer "una situación de no violencia con garantías" y el primer emplazamiento iba dirigido a ETA.

En concreto, solicitaban la declaración de "un alto el fuego permanente, unilateral y verificable por la comunidad internacional como expresión de voluntad para un definitivo abandono de su actividad armada". Los terroristas tardaron hasta medio año en dar respuesta parcialmente a esta cuestión en su comunicado de alto del 10 de enero ya que declararon un alto el fuego "general permanente y verificable", pero sin hacer ninguna mención a que la decisión fuese definitiva.