Ambas formaciones independentistas consideran que estas palabras son una muestra del "menosprecio" del jefe de la diplomacia española a las demandas de la ciudadanía catalana que este domingo, por sexto año consecutivo, ha salido a las calles pidiendo la celebración de un referéndum soberanista para que "sean las urnas, y no las preferencias de los gobiernos, quienes decidan el futuro" del pueblo catalán.
Tras exigir al Gobierno el cese del jefe de la diplomacia española por estas declaraciones, tanto CDC como ERC han unido sus fuerzas para reclamar la presencia del jefe del Ejecutivo central en el Pleno ante las manifestaciones de su ministro.