"En política hace falta buena gente", ha indicado. Por eso cree que la "oposición descalificadora" lo que consigue es "hacer mucho daño a Madrid y a España", además de dar un mal ejemplo a las generaciones más jóvenes.
La oposición le "reprocha un discurso buenista", ha expuesto arropada por los concejales Guillermo Zapata y Nacho Murgui. "¡Qué bien!, me digo. Me gusta que me acusen de buenista. Me asustaría que me acusaran de malista", ha declarado.