El camino al 20-N, una intensa campaña electoral que "no ha servido para nada"

cuatro.com 22/11/2011 16:55

Los sociólogos Pedro Arriola y José Juan Toharia coincidien en afirmar en el 'Debate sobre el Resultado de las Elecciones Generales 2011' que el domingo no deparó ninguna "sorpresa" y que la campaña electoral "no ha servido para nada", puesto que la expectativa de voto de los dos grandes partidos ha permanecido prácticamente inamovible desde inicios de septiembre.

Dos días después del 20-N, Nueva Economía Fórum ha hecho coincidir al presidente del Instituto de Estudios Sociales, Pedro Arriola, y al presidente de Metroscopia, José Juan Toharia, para debatir sobre los beneficios, sorpresas y balances de esta campaña electoral.

Ambos coinciden en que las líneas paralelas de voto sólo han sufrido una leve variación a raíz del debate cara a cara protagonizado por Rajoy y Rubalcaba en televisión. Para Rajoy, significó una "pequeña mejora en su imagen" y para el candidato socialista una "leve caída", pero "aquí no se ha movido una hoja desde principios de septiembre", dijo Arriola.

Desafección del electorado socialista

Toharia atribuyó los malos resultados del PSOE a la "desafección" progresiva de su electorado, y afirmó que incluso a los más "irreductibles" les traía sin cuidado que ganara el PP, según revelaban las encuestas.

En ese alejamiento tuvo un papel importante el hecho de que l os electores pensaran que las medidas adoptadas por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero fueran "impuestas desde fuera, injustas, tardías e ineficaces".

La sensación de injusticia arrebató a los socialistas el voto de los sectores más ideologizados de su electorado, mientras que la sensación de ineficacia alejó a los más pragmáticos, afirma Toharia.

Rubalcaba, un magnífico jugador con malas cartas

Toharia ha restado trascendencia a la derrota electoral pues sostiene que Rubalcaba es un político "brillante", con una "trayectoria consolidada", pero que jugaba una partida en la que "el que reparte las cartas no le contaba todo lo que tenía que haberle dicho".

Según ha explicado, el candidato socialista tenía una tarea "imposible" pues no podía criticar al Gobierno anterior y cada cosa que propusiese le iban a preguntar por qué no lo había hecho antes. "Se trataba de una partida en la que probablemente quien ha sido más leal con él ha sido la oposición y no el propio Gobierno socialista", ha apuntado.

Pedro Arriola ha añadido sobre Rubalcaba que "uno puede ser un magnífico jugador pero el azar está ahí y como le vengan a uno malas cartas de manera continuada se queda ahí".

A su juicio, en esta campaña electoral el PSOE ha tenido "errores de bulto y forzados" pues diseñó una "campaña presidencialista" que terminó con el cara a cara televisivo entre los dos principales candidatos a la Presidencia del Gobierno.

" Mariano Rajoy no ha pronunciado la palabra 'Alfredo Pérez Rubalcaba' ni una sola vez en la campaña electoral y a Rubalcaba no se le ha caído el termino 'Rajoy' de su boca en toda la campaña", ha agregado.

Continuidad y vuelco

Por su parte, Arriola reconoció que cuando los ciudadanos viven una crisis tan profunda y tienen sensación de estar en una situación de emergencia, "lo ideológico pasa a un segundo plano" y se tiene en cuenta la "sensación de bienestar" y el paso del tiempo.

Esa idea de que las cosas van bien implica que los electores opten por la "continuidad", mientras que si la sensación es la contraria, se deciden por el cambio. Además, los gobiernos en España suelen encadenar dos mandatos.

En este caso, opinó, las elecciones han significado un auténtico "vuelco", como ocurrió en las de 2004. Aparte de esos comicios ha habido cuatro de "cambio" y el resto han sido de continuidad.

Arriola ha añadido que, desde 2008, se ha producido "una correlación inversa" entre el incremento del paro y el descenso de votantes socialistas: "Con la subida, iba bajando el voto".

Techo electoral del PP

Ambos sociólogos comparten la idea de que el PP tiene un "techo claro" de votantes que es difícil de superar. Toharia afirmó que los populares tienen a todo su electorado concentrado, mientras que el PSOE tiene "mucha más competencia" en el ámbito de la izquierda, donde hay formaciones "refugio" para los críticos del PSOE.

Arriola, que asesora desde hace dos décadas al Partido Popular, reconoció que es difícil superar el número de votantes actual, aunque en el caso de unas elecciones se juega "con las cartas propias y las del contrario", lo que ha proporcionado una amplia victoria al partido de Rajoy.

En cuanto a las peticiones de reforma de la Ley Electoral, ambos se mostraron contrarios a modificar las reglas del juego, aun reconociendo que el actual sistema puede mejorarse.