"Mi función era dar datos al Duque para que pudiera lucirse en sus reuniones"

Cuatro/agencias 15/07/2013 14:15

Durante la declaración que prestó como imputado el pasado mes de junio, a cuya transcripción ha tenido acceso Europa Press, Sorribas explicó que fue nombrado apoderado de la sociedad de los Duques después de que éstos le anunciaran que se iban a marchar a Estados Unidos, por lo que "necesitaban a una persona que fuera un mandatario que pudiera ir a firmar papeles de contribuciones en el Ayuntamiento o en el banco, o cualquier cuestión de tipo menor".

Todo ello para que, explicó, "estos señores no tuvieran que venir cada vez desde Estados Unidos a arreglar temas".

Al ser preguntado por el fiscal anticorrupción Pedro Horrach sobre si entre sus funciones se encontraba la de controlar los ingresos periódicos que percibía Urdangarin de las mercantiles donde estaba como consejero asesor, Sorribas negó al respecto, si bien precisó que en algunas ocasiones el Duque le comentó que participaba en Consejos de empresas y le solicitaba informaciones acerca de los asuntos que debía abordar en sus reuniones.

"Mi trabajo era de documentalista hasta cierto punto, facilitarle a él todo tipo de cuestiones que le pudieran interesar y con las cuales él pudiera, digamos, no sé si lucirse sería la palabra, pero poder aportar algún tipo de dato en sus reuniones", abundó el encausado, recordando cómo tuvo que documentar una serie de prácticas en relación con la responsabilidad social corporativa de las empresas de comunicaciones y entregarle un informe para que Urdangarin pudiera exponer esos datos en Telefónica.

Sin embargo, frente a las argumentaciones ofrecidas por Sorribas, la Fiscalía sostiene que Urdangarin "interpuso" Aizoon para poder facturar "ciertos servicios de carácter personalísimo", como el servicio doméstico, que nada tenían que ver con la actividad de la inmobiliaria, todo ello con el objetivo de reducir su propia tributación en la declaración del IRPF.

De hecho, la Agencia Tributaria señala cómo durante 2007 y 2008, ejercicios en los que Urdangarin habría defraudado a Hacienda al menos 240.000 euros, utilizó Aizoon como "pantalla" para tributar gastos como los de su propio servicio doméstico o los de su asistenta personal, con el objetivo de beneficiarse de un tipo impositivo inferior, el aplicado a las sociedades.