El acusado ha sido trasladado desde los calabozos del puesto principal de la Guardia Civil de Las Rozas hasta las dependencias judiciales, donde ha llegado pasadas las 8.15 de la mañana y ha declarado durante dos horas ante el juez encargado de la investigación, Santiago Pedraz. Tras ser interrogado se ha celebrado una vistilla en la que las fiscales del caso han pedido prisión sin fianza para el presunto cabecilla de la conocida como operación 'Soule'.
El directivo ha sido el segundo en someterse a las preguntas del magistrado después de su hijo, Gorka Villar, a quien los investigadores acusan de haber sido beneficiario de contraprestaciones para la contratación de servicios y otras relaciones comerciales con la celebración de partidos de la Selección Española de Fútbol.
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