Según este análisis, que ha tenido en cuenta la contratación de servicios de transporte con conductor de 150.000 ciudadanos españoles de 18 a 55 años, en Madrid se decantan por esta fórmula de desplazamiento por encima del 10% de los clientes.
Esta penetración varía según las ciudades en que operan Uber y Cabify. En Barcelona, la penetración es del 3,7%; en Sevilla, del 3,2%; en Valencia, del 3,1%; en Málaga, del 3,0%; en La Coruña, del 2,6% y en Bilbao, del 2,3%.
EFECTOS DE LA HUELGA DE TAXISTAS
Los datos de este estudio reflejan que la huelga del colectivo de taxistas en oposición a la concesión de licencias VTC tuvo consecuencias negativas para estas plataformas.
En Madrid se redujeron los servicios en un 20% con respecto a la media de las semanas anteriores. Uber disminuyó sus servicios más de un 30% con respecto a semanas anteriores. Por su parte, Cabify experimentó un descenso en las contrataciones de un 12% durante esa semana.
El estudio del coste de los trayectos efectuados a través de VTC revela que durante el mes de mayo los desplazamientos con Cabify tuvieron un coste medio de 12,5 euros, mientras que en el caso de Uber fue de 10,75 euros.
Junto a los VTC, el análisis de Estudios Fintonic destaca el crecimiento de las propuestas de 'carsharing' como alternativa a los servicios anteriores. Empresas como Bluemove, car2go o Emov operan ya en Madrid y Bluemove también en Barcelona con un precio medio por trayecto inferior a 5 euros.
PERFIL DEL USUARIO DE VTC
Este estudio muestra que entre los clientes de las plataformas VTC, el segmento con mayor acogida es el de hombres menores de 35 años de nivel socioeconómico alto, con ingresos superiores a los 40.000 euros anuales.
A partir de los 35 años el uso de vehículos de alquiler con conductor decrece, y lo mismo ocurre entre las rentas inferiores a los 29.000 euros anuales.
Las mujeres usan este servicio por debajo de la media, con una penetración del 3,6%, frente al 4,3% los hombres.
Según los datos proporcionados por Estudios Fintonic, los clientes de estas compañías utilizan estos servicios una media de 3,5 veces al mes.