En el mes de diciembre, los pedidos domésticos registraron un incremento del 6,7%, mientras que las órdenes procedentes del exterior aumentaron un 3,9%. En concreto, los pedidos de la eurozona crecieron un 10%, mientras los nuevos pedidos de otros países se mantuvieron estables.
Los fabricantes de bienes intermedios vieron caer sus pedidos en diciembre un 0,6% respecto al mes anterior, mientras los fabricantes de bienes de capital registraron un aumento del 9,7%. En el caso de los bienes de consumo, los pedidos durante diciembre registraron un descenso del 1,8% respecto al mes anterior.