La agencia destaca que los esfuerzos de los bancos españoles para mejorar la calidad de sus activos, sanear sus balances, recapitalizarse e incrementar sus provisiones han mejorado su capacidad de absorción de pérdidas, aunque apunta que "el gran volumen de activos fiscales diferidos socava su fortaleza de capital".
"Si bien el 'stock' total de activos problemáticos de los bancos españoles sigue siendo alto, el sólido crecimiento del PIB
les permitirá continuar mejorando las métricas de calidad de sus activos, aunque a un ritmo más lento que el año pasado", indicó Alberto
Postigo, analista senior de Moody's.
Asimismo, Postigo expresó la confianza de la agencia en que la rentabilidad de las entidades españolas "se mantendrá estable en 2017-18", ya que las menores provisiones compensarán la presión de los bajos tipos de interés sobre los ingresos.