Los inspectores culpan a los gestores de las cajas, auditoras y al Banco de España de la crisis financiera

EUROPA PRESS 15/11/2017 18:09

Según ha señalado Delgado durante su intervención en la Comisión del Congreso que investiga la crisis financiera de España y el programa de asistencia financiera, los gestores de las cajas han sido "los principales responsables de la crisis financiera", dado que en muchos casos carecían de una formación mínima para los cargos que ocupaban y "antepusieron sus intereses personales a los de las entidades".

En opinión de Delgado, estos gestores deberían quedar "expresamente inhabilitados" para ejercer cargos en una entidad de crédito. "No entendemos que se haya dejado a la vía penal sin que se hayan incoado expedientes en la vía administrativa", ha dicho.

El secretario de la Asociación de Inspectores ha criticado que las firmas auditoras de las entidades "han presentado problemas serios de independencia" respecto de sus auditados, así como el hecho de que "ni una sola" de ellas haya presentado informes con salvedades durante el desarrollo de la crisis. "Sería conveniente endurecer el régimen de incompatibilidades actualmente vigente", ha apostillado.

Por otra parte, ha señalado que los Sistemas Institucionales de Protección (SIP) estaban mal diseñados desde el inicio, dado que "los problemas de las entidades crecen geométricamente, mientras que las sinergias lo hacen linealmente". Según ha dicho, si se fusionan entidades con problemas no es posible que den lugar a otra sin problemas.

Delgado ha criticado que los equipos de inspección "no llevaron a cabo revisiones completas" de las entidades que participaron en los procesos de fusión, así como que en la integración de Bankia y Banco Mare Nostrum (BMN) y en la crisis de Popular tampoco se ha requerido la realización de un informe de inspección.

En su opinión, el error más relevante del Banco de España fue la autorización en 2010 de la comisión ejecutiva a las cajas participantes en fusiones a través de los SIP de que aflorasen una parte de las pérdidas latentes de su cartera crediticia mediante un cargo a reservas y no mediante una cuenta de pérdidas y ganancias.

"Es el ejemplo más relevante porque sin esta autorización todas las cajas habrían declarado pérdidas millonarias" y los procesos de fusión "no podrían haberse llevado a cabo", según Delgado, que ha añadido que "no hubiera habido más remedio que reconocer esta situación de vulnerabilidad e intervenirlas". En el caso de Bankia, esta decisión permitió cargar a reservas 450 millones de euros, de los que 110 millones de euros correspondían al pago de bonus de los directivos, según ha dicho.

"Preferiríamos no tener que comparecer en el futuro, porque sería un síntoma de que se habrán adoptado las medidas pertinentes", ha apuntado Delgado, que ha añadido que la asociación no desea "que se produzca en el futuro un desastre que se lleve por delante a la Unión Europea".