Así lo ha señalado durante su intervención en el debate de totalidad del proyecto de Presupuestos en el Congreso, en el que ha opinado que la nueva aritmética parlamentaria ha propiciado que los Presupuestos respondan a las prioridades de una "nueva mayoría" y se enmarquen en el cumplimiento de los ajustes a los que España está obligada por su pertenencia a la UE.
Martínez considera que el proyecto es "manifiestamente mejorable" bajo la prisma de criterios encaminados a preservar la eficiencia gasto pública y equidad de su distribución evitando agravios comparativos entre CCAA.
Por ello, ha propuesto un mejora del contenido y ha pedido que se culminen los acuerdos de los contenidos del pacto de coalición suscrito entre el PP y la formación asturiana en las pasadas elecciones.
En esta línea, ha emplazado al Gobierno a repasar el documento del pacto y alcanzar acuerdos "cruciales" para el futuro de Asturias. Los Presupuestos contemplan una inversión en la comunidad asturiana de 211,25 millones, lo que supone un descenso del 31,33% respecto a 2016.
LAS "URGENCIAS" DE ASTURIAS.
"Asturias tiene urgencias y necesidad del compromiso del estado para salir del declive y la decadencia, para engancharse a la locomotora del Estado y las mejoras favorezcan la competitividad", ha remarcado.
A este respecto, ha criticado el "anacrónico" marco ferroviario y ha marcado la necesidad de mejoras en el campo de telecomunicaciones, en el diseño de productos financieros en las centrales técnicas para cumplir con la meta del carbón limpio, y de cumplir la sentencia firme de convenios de fondos para reactivar las comarcas mineras asturianas.
También ha apuntado la urgencia de revisar el reparto de las ayudas de la PAC a la ganadería ante el nuevo escenario de desaparición de cuotas lácteas.
Con su rechazo a las enmiendas a la totalidad confía en que se abra un plazo para alcanzar un acuerdo que asegurar el cumplimiento del programa de gobierno entre el PP y Foro Asturias, a lo que el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, se ha mostrado receptivo en aras de la "estabilidad política" y el crecimiento económico y la creación de empleo.