Se trata de la autopista M4, en la que la compañía implementará tecnología para gestionar el tráfico, evitar congestiones y atender accidentes en tiempo real, todo ello con el fin de reducir en hasta quince minutos los trayectos por la vía y en hasta un 30% los siniestros.
La vía que Ferrovial convertirá en 'inteligente' es una autopista de unos 40 kilómetros y varios carriles que se extiende desde Oeste de la ciudad de Sidney hsta la ciudad metropolitana de Lapstone.
Ferrovial se ha hecho con el contrato a través de un consorcio en el que participa a través de su filial de servicios británica Amey y que completa la firma Arup.
Con este proyecto, la compañía que preside Rafael del Pino avanza en su expansión por el mercado australiano de las infraestructuras y los servicios, después de lograr en el país una autopista y de hacerse con la firma Broadspectrum a través de una OPA.
NUEVAS TECNOLOGÍAS Y MOVILIDAD.
Asimismo, con este contrato, la filial de Ferrovial aumenta su experiencia respecto a las nuevas tecnologías y la movilidad, después de que hace unos meses anunciara su entrada en un consorcio que se encargará de investigar y realizar un estudio en Reino Unido sobre las implicaciones del desarrollo del vehículo sin conductor y su potencial impacto en la red de infraestructuras del país.
Este análisis se publicará en 2017 y su objetivo es aportar información que sirva para argumentar y determinar las políticas y decisiones relacionadas con el coche autónomo que se tomen en las próximas décadas.