El enfrentamiento entre el Eurogrupo y el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre cómo reducir el enorme peso de la deuda griega, que tocará el 190% del PIB el próximo año, ha impedido alcanzar un compromiso en los anteriores intentos. El FMI reclama a los países del euro que asuman pérdidas en sus préstamos a Grecia, algo que rechazan todos los Gobiernos, incluida España que tiene una exposición de 25.000 millones a Atenas.
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha dicho este lunes que "lo importante" de cualquier solución es que resulte "creíble".
"Vamos a intentar trabajar en una solución que sea creíble para Grecia", ha indicado Lagarde a su llegada al Eurogrupo. "Eso es lo importante, que sea creíble y que sea para Grecia, así que vamos a trabajar muy atentamente", ha resaltado.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha dicho que el acuerdo está "muy cerca" porque los países de la eurozona ya han zanjado la mayor parte de sus diferencias, pero ha considerado imprescindible sumar también al Fondo Monetario Internacional (FMI).
"Estamos muy cerca, estamos muy próximos. Entre los países de la zona euro no hay muchas divergencias", ha señalado Guindos a su llegada a la reunión extraordinaria del Eurogrupo.
"Ahí lógicamente nos tenemos que poner de acuerdo con el FMI y este acuerdo con el FMI, desde el punto de vista del Eurogrupo y desde el punto de vista del Gobierno español, es muy importante, es un tema fundamental", ha resaltado.
El FMI exige a los países de la eurozona que condonen parte de la deuda griega para garantizar su sostenibilidad. Pero el Eurogrupo rechaza una quita y sólo acepta soluciones como reducir los tipos de interés de los préstamos bilaterales a Atenas o distribuir los beneficios de los bonos helenos en manos del Banco Central Europeo (BCE).
"Esto no es un tema de pérdidas", ha insistido Guindos. "España va a hacer todo lo posible para que haya un acuerdo tanto desde el punto de vista técnico como desde el punto de vista político", ha resaltado el ministro de Economía.
A su juicio, el acuerdo es "extremadamente importante" no sólo para Grecia sino para el conjunto de la eurozona, ya que se trata de "un elemento básico a la hora de generar confianza".