Así, el mayor número de notificaciones proviene de juguetes (con cinco productos alertados), seguidos por productos eléctricos (cuatro alertas) y vehículos y accesorios (una alerta). En el caso de los juguetes, las alertas se deben a la especial vigilancia a la que están sometidos estos productos por parte de los servicios de inspección al estar dirigidos a una población vulnerable mientras que las alertas en vehículos y accesorios se dan por el seguimiento que los propios productores efectúan en sus productos.
Además, la lista incluye productos de moda infantil y accesorios, equipos de protección individual y artículos decorativos. Según consumo, los riesgos que plantean estos productos son consecuencia de las irregularidades que se les ha detectado.
Por último, por lugar de procedencia, China encabeza la lista de alertas con 12 productos, seguido por Reino Unido y Tailandia, que registran una alerta cada uno.